sábado, 19 de septiembre de 2009

con la tristeza viviendo en mi corazón


...una decisión que me cortó la sensación de vivir, de permitirme amar, y de que me amaran; como si ya no pudiera tolerar nada(ni un respiro, ni una palabra)pues ya sentía no merecer nada;que me hizo desear la muerte no una vez,sino muchas, y que en mi corazón solo sentía dolor, dolor de no poder regresar el tiempo y haber decidido distinto; horas, días, meses... tiempo ke no terminaba de dolerme,cada día era como morir una y otra vez y otra vez y preguntarme porqué ¿porqué lo hice? agobiada, aturdida en mi mente,llena de lágrimas hasta desbordarse de mí,hasta desear no volver a respirar, pero lo hacía y me dolía, me dolía hasta quedarme dormida para no darme cuenta de que yo sí estaba viva...

Si ya lo hiciste y no hay marcha atrás...


Será muy difícil superarlo, pero Dios está a tu lado y te escucha, escucha tu clamor y tu tristeza si en realidad estás arrepentida: El te perdona mediante el sacrificio de su hijo Jesús, El carga con todos nuestros pecados y a ti te libera con solo arrepentirte de verdad y buscar su perdón en tu corazón.
"Ciertamente él cargo con nuestras enfermedades y soportó nuestros dolores, pero nosotros le consideramos herido, golpeado por Dios, humillado. El fue traspasado por nuestras rebeliones, y molido por nuestras iniquidades; sobre él recayó el castigo, precio de nuestra paz, y gracias a sus heridas fuimos sanados. Todos andábamos perdidos, como ovejas, cada uno seguía su propio camino, pero el Señor hizo recaer sobre él la iniquidad de todos nosotros" (Isaías 53:4-6).
Porque Dios nos perdona, perdónate a ti misma también y a quienes te rodearan en esa amarga decisión; recuerda el Padre Nuestro "perdona nuestras ofensas como nosotros perdonamos a quienes nos ofenden"; es corresponder al perdón de Dios el perdonar nosotros también.
Mantente en oración y El te enseñará un nuevo camino, siempre hay esperanza.
No estás sola, escribe a: mibebeyyo@live.com.mx